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Habilidades de oficiales de cumplimento

El rol del oficial de cumplimiento exige orden, precisión y rigor, requiere comprensión del contexto, escucha activa y capacidad de adaptación. Porque cumplir no significa imponer; significa acompañar procesos, anticipar riesgos y habilitar decisiones sostenibles sin apagar la operación.

Ahí está el verdadero desafío: encontrar el punto justo entre ejercer el control que la función exige y ofrecer la flexibilidad que los equipos necesitan para operar con agilidad. No se trata de ceder principios, sino de liderar con criterio.

Como decía el abogado y experto en cumplimiento Jeffrey Kaplan: “La efectividad de un programa de cumplimiento no se mide solo por los controles que tiene, sino por la forma en que esos controles se integran a la cultura del negocio.”

Control y flexibilidad en oficiales de cumplimiento

Para un oficial de cumplimiento, el control no puede ser opcional. Está llamado a asegurar que las políticas se apliquen, que los procesos se documenten y que los riesgos se mitiguen con evidencia. Pero si ese control se aplica de forma impositiva, desconectada de la realidad operativa, pierde efectividad y genera resistencia.

Ejemplo real: un oficial de cumplimiento define un protocolo estricto para la vinculación de terceros. En lugar de exigir que cada área lo aplique de manera idéntica, permite que los equipos ajusten el flujo según sus procesos, siempre que se respeten los mínimos obligatorios (consultas en listas, documentación básica, validación de identidad, etc.). Así, el control se ejerce sin entorpecer la operación.

Flexibilidad sin perder foco

Ser flexible es comprender que los negocios no se mueven a una sola velocidad ni enfrentan siempre las mismas situaciones. Y que, en algunos casos, adaptarse es parte del cumplimiento.

Caso hipotético: ante una operación urgente con un proveedor internacional, el equipo comercial solicita apoyo al oficial de cumplimiento para validar antecedentes sin demorar la negociación. En lugar de exigir el protocolo completo de inmediato, se acuerda una validación inicial con listas restrictivas automáticas y se continúa el proceso documental en paralelo. Se cumple, se avanza y se protege el riesgo.

Buenas prácticas para conseguir un equilibrio entre flexibilidad y control

1. Define lo innegociable
Todo sistema necesita límites claros. En cumplimiento, esto significa identificar los controles que no pueden modificarse: reportes a la UIAF, procesos SARLAFT, requisitos legales específicos. Ser transparente sobre qué es flexible y qué no, facilita el diálogo con las áreas.

2. Acompaña, no impongas
El oficial de cumplimiento no debe ser visto como una barrera, sino como un aliado. Explicar el “para qué” detrás de cada medida, buscar soluciones conjuntas y estar disponible para resolver dudas genera cercanía y colaboración.

3. Documenta con inteligencia
No es lo mismo tener un archivo lleno de formatos que tener trazabilidad útil. Diseñar herramientas de reporte simples, enfocadas en lo esencial, ayuda a mantener el control sin burocracia innecesaria.

4. Capacita desde casos reales
Una forma efectiva de integrar cultura de cumplimiento es contar historias: qué ocurrió en otras empresas, qué señales de alerta ignoraron, qué impacto tuvo la falta de control o de criterio. Esto sensibiliza más que repetir la norma.

5. Escucha lo que no está en el papel
Los mejores insights no siempre vienen de auditorías. A veces vienen de una conversación informal, de una duda repetida, de una práctica que todos hacen “porque siempre se ha hecho así”. Ser flexible también es estar abierto a detectar lo que no está escrito.

Un equilibrio que se construye, no se decreta

El equilibrio entre control y flexibilidad no es una receta. Es una práctica. Requiere revisar constantemente lo que funciona y lo que no. Implica observar cómo reacciona el equipo, cómo cambia el contexto, cómo se siente la cultura. A veces hay que ajustar más hacia el control. Otras veces, aflojar para dar más aire. Lo importante es no perder de vista el objetivo: que la estructura sostenga, pero no limite.

Así lo vivimos en Cadena

Acompañamos empresas de sectores regulados como servicios públicos, transporte, financiero, entre otros, donde el equilibrio entre cumplimiento y operación es vital. Nuestras soluciones están diseñadas para garantizar trazabilidad, autenticidad y control, sin frenar los flujos de negocio.

Ya sea en la verificación de listas restrictivas, la gestión de documentos críticos o la automatización de reportes sensibles, trabajamos con oficiales de cumplimiento que saben que liderar no es solo vigilar, sino también construir confianza.

Etiquetas: Transformación de Data
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